Mejorando el acceso a la salud menstrual para niñas y adolescentes en Perú porque la salud menstrual es un derecho. Una investigación sobre la implementación en la escuela y en el sistema de salud.
El proyecto busca implementar soluciones integrales para mejorar la gestión de la salud menstrual (MHM) en Perú y se enfoca en Lima, Ucayali y Ayacucho, tres regiones que representan la diversidad geográfica y cultural del país. Estas localidades servirán como sitios piloto para la creación de un modelo de intervención adaptado a las necesidades de niñas y adolescentes que viven en pobreza y extrema pobreza. A través del co-diseño con actores locales (docentes, personal de salud y familias), se busca derribar barreras sociales y culturales que impiden el acceso a una salud menstrual digna.
REGLAS DE CAMBIO tiene como propósito principal garantizar que las niñas y adolescentes cuenten con información, productos adecuados y servicios sanitarios que les permitan gestionar su menstruación de manera saludable. Además, el proyecto busca:
- Evaluar barreras y facilitadores mediante encuestas y entrevistas en escuelas y centros de salud.
- Pilotear y adaptar el modelo de intervención según los resultados del diagnóstico.
- Desarrollar materiales educativos y crear una plataforma digital para compartir buenas prácticas y fomentar una comunidad de aprendizaje en salud menstrual.
Impacto esperado: Reglas de Cambio, la salud menstrual es un derecho
Este proyecto, además de contribuir a reducir el ausentismo escolar de niñas durante su menstruación, empoderará a las adolescentes al ofrecerles un entorno educativo y de salud más seguro y libre de estigmas. Asimismo, se fortalecerán las capacidades de los profesionales de salud y educación para que, por un lado, brinden servicios informados y, por otro, actúen con empatía.
Por otro lado, REGLAS DE CAMBIO resalta que la salud menstrual no solo es un derecho humano fundamental, sino que también representa un paso significativo hacia la equidad de género y el empoderamiento de niñas y adolescentes. Finalmente, con esta intervención, Prisma ONG e IDRC establecen las bases de un modelo sostenible que podrá replicarse en otras regiones del Perú.