Prisma Talks: Consejos para un trabajo remoto saludable

marzo 19, 2021

Los consejos de especialistas para un trabajo remoto saludable son cada vez más necesarios para aprender a balancear positivamente la vida familiar con la del trabajo. Esta nueva normalidad supone el futuro de la forma de trabajar en el mundo.

Las medidas de confinamiento por la pandemia de la COVID-19 han traído consigo una serie de cambios para la humanidad, entre ellas la forma de trabajar. Hoy en día, el trabajo desde casa, haciendo uso de los medios digitales y el internet, es una nueva normalidad que augura un futuro post pandemia con cambios trascendentales para las empresas y sus colaboradores. En una nueva edición de nuestro espacio Prisma Talks, conversamos con nuestra especialista en psicología organizacional Elizabeth Inga, quien nos grafica este panorama y nos brinda consejos que debemos seguir para lograr un trabajo remoto saludable.

El trabajo remoto antes y después de la COVID-19

Hasta el 2018, se hablaba poco sobre el trabajo remoto y tan solo el 22% de las empresas en el Perú[1] empleaba esta modalidad en sus trabajadores. Así, se desaprovechaban los beneficios que ofrece, tanto para la empresa como al colaborador. La llegada de la COVID-19 y las medidas de confinamiento, impulsaron esta nueva forma de trabajo en todo el país de forma abrupta y generalizada.

“El trabajo remoto consiste en trabajar donde tú te sientas más cómodo, en tu casa, un café u otra parte. Ya el trabajo no depende de dónde estés sino del cumplimiento de tus objetivos con la empresa”, señala nuestra especialista. Aunque por el confinamiento, esta modalidad de trabajo se ha enfocado únicamente en la casa para evitar la propagación de la COVID-19.

Esta nueva modalidad de trabajo no implica solamente llevar el trabajoa casa, sino existe un trasfondo mayor. “Debe existir una cultura de cambio en la organización, la disposición de adaptarse al cambio o nuevas circunstancias desde los directores o la gerencia hasta la última persona que conforma la organización”, asegura Elizabeth Inga. Es un trabajo en conjunto para estar alineados por un beneficio en común.

La empresa debe brindar las facilidades para que el colaborador se sienta seguro y pueda cumplir con sus responsabilidades. De manera general, las empresas han realizado diversas acciones: constitución de comités frente a la COVID-19, diseño de protocolos de bioseguridad, nuevos procesos internos, traslado de herramientas de trabajo al hogar del colaborador, canales de información actualizada y confiable, entre otros. Una buena gestión del cambio nos llevará a nuevas oportunidades de mejora.

Por ello, es determinante seguir consejos de especialistas para un trabajo remoto saludable que equilibre nuestra vida familiar con la del trabajo en casa.

Ventajas y riesgos del trabajo remoto

«Todas las personas somos diferentes y el trabajo remoto tiene impactos según el entorno psicosocial de cada persona». Dependiendo del entorno familiar y social, esta modalidad de trabajo representaría una oportunidad o una situación de estrés o ansiedad.

A continuación, señalamos algunos beneficios y riesgos más frecuentes:

Beneficios:

Reduce el desplazamiento, se presenta una reducción de estrés en comparación al tiempo de viaje que se utilizaba para ir al centro de trabajo.
Genera compatibilidad entre el trabajo y la vida familiar, lo cual permite mayor tiempo de calidad en familia.
Incrementa la flexibilidad laboral. Los colaboradores pueden manejar mejor su horario de trabajo en base a sus necesidades o exigencias diarias en casa y/o urgencias.
Mejora el clima laboral de la empresa y se manifiesta en el rendimiento de sus colaboradores.

Riesgos:

Dificulta establecer límites para los horarios de trabajo, lo cual conlleva a cansancio, ansiedad y estrés en el colaborador.
Incrementa el agotamiento físico, mental y emocional. La carga laboral se ve incrementada por las responsabilidades de casa, y se agrava si se tiene a cargo a niños, adolescentes, adultos mayores o personas enfermas.
Produce dificultad de decir no a los correos o llamadas y la necesidad de estar presente siempre, lo cual no nos permite desconectarnos del trabajo completamente.
Aumentan los distractores potenciales dependiendo del lugar donde te encuentres: ruido de celulares, personas conversado, música a alto volumen, ruidos de la calle, etc.

Consejos para un trabajo remoto saludable

Ante estos riesgos señalados, nuestra especialista nos brinda algunos consejos para lograr un trabajo remoto saludable.

Establece un lugar adecuado para realizar las labores, es decir, que se diferencie de donde se comparte con la familia y también de donde duermes o almuerzas. Además, que tenga lo más mínimo de distractores, con buena iluminación y sin bulla.
Pon límites con el tiempo para desconectarte y cuidar tu salud mental. Es importante establecer horarios y ceñirnos a ellos; y en tiempo de ocio realizar actividades que nos permitan distraernos y relajarnos.
Realiza pausas activas que te permitan recargar energías. Este tiempo, que puede ser de 3 a 4 minutos, permite reconectarnos con el trabajo y ser más productivos.
Mantén hábitos saludables. Come saludable, realiza actividad física y descansa correctamente para favorecer a nuestra salud física y mental.
Cambia tu atuendo para empezar a trabajar. A pesar que no se realiza trabajo en oficina, es positivo cambiarse la ropa y simular la rutina cuando se salía de casa al trabajo.
Utiliza la técnica de desactivación fisiológica. Luego de una rutina de trabajo, es beneficioso realizar esta técnica de respiración diafragmática para “quitar” el estrés del día y poder acoplarte a tu vida familiar o personal.

Estos consejos nos permiten crear un trabajo remoto saludable y, mejorar nuestra salud y bienestar. Finalmente, sobreponerse a los cambios es necesario para seguir avanzando, pero siempre sin perder de vista que no todo es trabajo, sino darle tiempo y espacio a otros aspectos importante de nuestra vida, como nuestras familias y pasatiempos.

El trabajo remoto en Prisma ONG

Prisma ONG implementa el trabajo remoto desde el año 2019, contemplando dos etapas: un plan piloto y una forma progresiva a todas las áreas de la organización. En el 2020, con el inicio de la pandemia, el trabajo remoto se generalizó a todos los colaboradores suponiendo cambios en la forma de comunicación y trabajo: se implementaron nuevas herramientas de comunicación como Teams y se fortalecieron las actividades de integración. Asimismo, se garantizó que los colaboradores cuenten con un mobiliario adecuado, además de brindar protocolos y encuestas para conocer el proceso de adaptación.

Estas prácticas han tenido impacto en la productividad, en el incremento de la participación y colaboración de los equipos, así como también en los resultados de la Encuesta de Clima Laboral 2020, donde se incrementa en 10% el nivel de satisfacción de trabajo en la institución.